Los paneles solares policristalinos poseen una eficiencia que oscila entre el 15% y 16%, que es menos de lo que ofrecen los ejemplares monocristalinos. No obstante, son muy convenientes para los negocios que necesitan contar con varios ejemplares para sus instalaciones, debido a que son más asequibles. También son ideales para instalaciones comerciales, donde la superficie juega un papel no tan relevante.
Se fabricaron por primera vez para uso comercial en 1982 por Kyocera y, actualmente, son los más utilizados. Si desean adquirirlos, deben saber cuándo se recomiendan estos y cuándo su contraparte, los monocristalinos. También vale la pena conocer algunos aspectos para realizar una compra informada.
¿Cómo se fabrican los paneles solares policristalinos?
Si bien parece una tecnología muy sofisticada, el proceso para producir las celdas policristalinas es sencillo. También es la razón por la que son más asequibles que las celdas solares monocristalinas. El proceso es el siguiente:
- Primero, son fundidos los bloques de silicio y cristalizados en un bloque grande que es enfriado para crear un conjunto sólido.
- Una vez que el bloque se enfría, es cortado en finas rodajas, como una cebolla. Es aquí donde comienza a formarse la celda solar. Las impurezas del silicio son eliminadas por completo mediante fusión a temperaturas elevadas (1,500 °C).
- Posteriormente, los discos son transformados en celdas, lo que conlleva la limpieza y aplicación de los conductores eléctricos y el recubrimiento antirreflectante.
- El resultado es una celda de color azul oscuro, en la que son visibles pequeños cristales. A ello se debe su nombre: celda policristalina. Su forma es cuadrada y cada lado mide aproximadamente 16 cm.
Actualmente, los fabricantes crean cristales lo más grandes posible. Si hay muchos cristales en la celda de los paneles solares, habrá menor libertad de movimiento para los electrones, lo que conlleva bajo rendimiento.
¿Cuál es su eficiencia?
Como señalamos, su eficiencia oscila entre 14 y 16%. Pero ¿en qué consiste esa eficiencia? En el caso de los paneles, consiste en el porcentaje de electricidad que puede generarse a partir de la luz solar. En los sistemas policristalinos el porcentaje es menor que los ejemplares monocristalinos, pero es mayor en comparación con los paneles de capa fina.
La causa de que sea menos eficiente es la pureza del silicio, que es más baja si se compara con las contrapartes monocristalinas. Por otra parte, las celdas policristalinas tienen forma cuadrada, en cambio, las monocristalinas tienen bordes redondeados. Sin embargo, no significa que no pueda mejorarse esa tecnología. De hecho, hay fabricantes, como Suntech en China, cuyos paneles policristalinos logran una eficiencia de hasta el 19%, aunque no se encuentran disponibles para instalaciones privadas. Además, es menor aún comparada con la máxima eficiencia de su contraparte, que es del 25.6%.
¿Qué ventajas ofrecen?
Entre las ventajas que ofrecen, destacan las siguientes:
Precio bajo
Una de las curiosidades de los paneles solares policristalinos es que, al ser más sencillo el proceso para producirlos, el precio de venta es menor y en pesos por Watts pico, que es la medida más relevante al momento de comparar costes. En otras palabras, brindan más energía a bajo precio. Algunas ventajas que ofrecen son:
Mayor superficie de celdas por panel
Las celdas policristalinas son perfectamente cuadradas, por tal motivo, encajan a la perfección, a diferencia de las celdas monocristalinas, que son cortadas cilindricamente, lo que causa pérdidas en sus esquinas.
Menos residuos
Esto se debe a la sencillez de su proceso productivo.
¿Cuáles son sus limitaciones?
Entre las limitaciones, se encuentran las siguientes.
Menor eficiencia
Ya mencionamos cuál es la eficiencia de las celdas policristalinas. Esto indica que hasta un 16% de la luz que incide en los paneles pueden convertirse en electricidad. Este porcentaje es mayor en los ejemplares monocristalinos, que está entre 15 y 20%. La variedad de cristales es lo que les limita, a diferencia de las celdas monocristalinas, que son un solo cristal, lo que permite el libre movimiento de los electrones.
Menos estética
Presentan un color azul oscuro, por lo que pueden considerarse menos estético, ya que el reflejo de ese color no encaja en varios tejados. En cambio, los módulos monocristalinos o de capa fina son negro y menos reflectantes, por tal motivo, son los más elegidos por motivos meramente estéticos. En realidad, no es una limitación, ya que los paneles solares son bastante llamativos. Es imposible no voltearlos a ver cuándo se instalan en edificios comerciales, además reflejan una imagen corporativa favorable y compromiso medioambiental.